Si en la introducción ya advertí de la brevedad de estas exposiciones, debo llamar la atención aún más sobre el esfuerzo de concisión que he hecho para intentar mostrar de un vistazo lo expuesto hasta ahora. Y en razón de esa concisión creo conveniente apuntar las siguientes observaciones:
- Ya comenté en la introducción que a grandes rasgos podríamos caracterizar la evolución histórica de la educación como una extensión a toda la sociedad y no solo a individuos "elegidos". Sin embargo, esta generalización resulta incompleta pues no podemos negar la importancia que también se pretende dar a la formación integral de cada persona (y así queda recogido en los textos legislativos de los países occidentales).
- En este sentido (en función de los destinatarios) es como aparece en el esquema la palabra "finalidad", independientemente de otras cuestiones teleológicas.
- También en la introducción mencioné que esta elección de modelos no es completa y, a resultas de algunos comentarios, colijo que no están todos ni todos son los más importantes para todo el mundo.
- Sin embargo, esto último justifica precisamente esta elección (y probablemente otras similares). Por lo siguiente:
- El esquema pretende hacer de foto resumen de lo expuesto.
- Como tal, recoge los tópicos más extendidos sobre cada modelo.
- Pero cada modelo tiene sus matices e interpretaciones.
- Motivo por el cual existe permeabilidad entre los modelos (más entre unos que entre otros).
- Y, además, ningún profesional de la educación se restringe a un único modelo.
- A pesar de todo, no se puede hablar de equidistancia. Cada cual en su concepción sobre la educación (cualquier educador, profesional o no) se verá identificado más con unos tópicos que con otros, o aun con unos modelos u otros.
- Porque, en suma -y nunca me canso de insistir sobre ello- no podemos referirnos a la educación como una ciencia (ni falta que hace, en mi humilde opinión).
Espero que os resulte útil.
PD: En la siguiente entrada me apoyaré en las exposiciones hechas y en este resumen para mostraros algunos argumentos que a mi juicio han de valorarse para lograr una mejor educación. Por supuesto, una mejor educación para todos.
Hola,
ResponderEliminarNo entiendo muy bien tu gran conclusión final: "la educación no es una ciencia"
Es evidente que no lo es, del mismo modo que la ingeniería tampoco lo es.
Pero ninguna de estas actividades queda al margen del estudio científico, que creo que es a lo que se refiere tu conclusión. Hay multitud de disciplinas que estudian la educación: Sociología, Pedagogía, Psicología, Historia, Economía, Antropología, Didáctica etc
Está claro que no se sabe todo de la educación, que no es en modo alguno algo exacto, pero no se debe dejar de lado a la ciencia por ese motivo
Al problema que indicas se le viene a denominar "complejo del cientifista" que se está extendiendo peligrosamente.
EliminarHola, Jose Martín.
ResponderEliminarMe gusta que trates en tu blog temas sobre la educación, es algo muy importante que poco se hace. Pero no estoy de acuerdo con tu artículo.
Ni la redacción ni tu conclusión están claras. Parece que culparas a los modelos educativos cuando el problema es el sistema educativo, el cual, a su vez, no está manejado por profesionales de la educación, y he aquí el problema de muchos países.
Tampoco tiene sentido excusar que la educación como extensión a toda la sociedad está incompleta debido a que se da la formación integral del individuo, es como decir que no todos sabemos inglés debido a que tenemos la capacidad de aprender sobre todas las artes. No tiene mucho sentido. Creo que te has expresado mal y quisiste decir otra cosa.
El problema que expones en tu penúltimo punto no existe entre profesionales de la educación, solo existe con los no profesionales o con aquellos profesionales que anteponen otros intereses a la educación sin realmente dedicarse a ésta por vocación. Y de nuevo esto es lo que ocurre en España y muchos países.
Por último, decir que la educación no es una ciencia es lo mismo que decir que la vida no es una ciencia. Claro que no lo son. Sin embargo, hay ciencias que estudian la vida, como la biología, igual que hay ciencias que estudian la educación, como la pedagogía. Lo tuyo es un error de conceptos muy común.
El título de tu artículo no ha quedado explicado, te has metido a hacer una afirmación muy polémica que no puede mostrar validarse en sólo ocho párrafos. Y si la educación no tiene recetas para todo, preguntémosle entonces a países como Finlandia, que bien sabrás que su educación es una buena receta.
Hola, Lorenzo.
EliminarAgradezco tu comentario.
En realidad, este post es un pequeño recopilatorio de lo que vine en llamar modelos pedagógicos. Tradicionalmente a esos modelos se los ha calificado como modelos de aprendizaje, pero, como señalé en la "Introducción", dicha calificación se quedaba corta, pues comprendían muchos más aspectos que meramente el acto didáctico: políticas educativas, actitudes docentes, estilos de aprendizaje, e incluso contenidos, por citar algunos. Quise hacerlo así precisamente para significar la importancia que han tenido para el modelo tradicional, que siguen teniendo en cualesquiera modelos que se quieran teorizar, con su correspondiente terminología.
Con todo ello, como verás, no trato de cargar las tintas contra esos modelos (ni los que sean), sino, al contrario, señalar las aportaciones de cada uno de ellos. No son todos ni creo que este humilde blog persiga ser un tratado sobre ese tema (ni sobre ningún otro). Sin embargo, la intención, meramente expositiva, de los modelos anteriores, así como de esta entrada era describir la complejidad de la actividad educativa sobre la base de esos conocimientos que no he querido agrupar en la categoría de ciencia.
A mi entender, no pasa nada por que un saber no sea ciencia. La literatura no es ciencia, por ejemplo, y tiene todos mis respetos.
Tampoco quería entrar en filosofía de la ciencia (que si círculo de Viena, que si paradigmas de Kuhn...). No.
Se habla de la ciencias de la educación, pero costaría hablar de ciencia educativa. Y, contestando también al primer comentario (anónimo), no es una consecuencia lo que afirmo, sino, como tú señalas, una evidencia.
En relación a la inclusión de mi comentario sobre la "formación integral del individuo" para "excusar que la educación como extensión a toda la sociedad está incompleta", puede que tengas razón y no me haya explicado suficientemente. Intentaré hacerlo ahora: Como advertí, resulta reduccionista afirmar que la evolución histórica de la educación ha transcurrido de educar a un solo individuo a educar a toda la sociedad. Pero quise señalar que la educación del individuo sigue vigente, en el sentido de que, puesto que no estamos en Esparta, los sistemas educativos occidentales (a los que podemos presumir no totalitarios) no buscan educar a todos como si fueran clones o robots, sino como personas, en uno de sentidos arcaicos (conducir), para sacar lo mejor de sí mismas, pero no solo para la sociedad, sino para cada una de esas personas; es decir, hacia todos, para todos, pero salvaguardando la personalidad o, mejor dicho, lo genuino de cada cual.
Por último, el sentido del post, de los que le preceden y del siguiente, no es otro que el de cuestionar a quienes se erigen en expertos basándose en cifras y datos como si la cosa fuera tan fácil. Citas a Finlandia. Bien, Finlandia lleva a cabo una serie de acciones dentro de un sistema propio. Posiblemente exportable en algunos casos (formación del profesorado, pacto educativo...) a algunas sociedades. Pero son acciones basadas en un contexto histórico, social, político, cultural, económico... que cambia y, vuelvo a decir, propio. No tiene recetas para todo.
Por supuesto que la educación no es pedagogía (tampoco me voy a meter en el jardín de si la pedagogía es una ciencia, como ya insinué antes). Tampoco es psicología, ni política educativa. La educación es un proceso o una serie de procesos orientados a contribuir al bienestar de las personas, basado en facilitarles la comprensión sobre sí mismos y sobre el entorno en el que se desarrollan. Es, por tanto, un complejo conjunto de acciones que no están sujetas a leyes universales, afortunadamente (en mi humilde opinión). Y que, por tanto, requiere del interés de todos, y no solo de quienes se autodenominan expertos.
Un saludo.
Gracias por responder, Jose.
ResponderEliminarAhora me ha quedado un poco más claro el artículo, debo leer los que le preceden. Aunque sigo sin estar de acuerdo en algunos aspectos, pero son cosas menores, como que la educación realmente sí es psicología, sí es política educativa y, sobretodo, sí es pedagogía (y esto sí es una ciencia, sin que haga falta entrar en paradigmas de Kuhn, cículos de Viena y Karl Popper). Y sí es, por tanto, un conjunto de acciones sujetas a leyes universales, en gran parte a leyes de la conducta, jugando también la biología un papel importante en este entramado. Pero que esto sea así no significa que no esté requiriendo del interés de todos, al contrario, todos deberían mostrar interés por la educación, empezando por saber lo que he dicho.
Y si ese no fuera el principal tema a tratar. Quizá el problema que le veo al artículo, y supongo es intencionado, es que no muestra una clara inclinación hacia ningún lado, no muestra defender ni acusar algo, y, aunque esto pudiera llamarse ser objetivo, la forma en que está redactado denota lo contrario, empezando desde el título, y de ahí porqué llama a debate. Por ello, si esa es tu intención, pues perfecto.
Un saludo y ánimo con el blog, sobretodo por tratar estos temas y permitirnos opinar a los lectores.
Lorenzo, es un placer intercambiar opiniones.
ResponderEliminarUn saludo.